En la Sala ON se puede disfrutar de El circo invisible, un espectáculo de teatro del absurdo protagonizado por Patrizia con Zeta y Miren Jalón y escrito y dirigido por Angelo Orlando.
En Espectáculos BCN hemos querido entrevistar a las actrices que interpretan a dos coprotagonistas de la obra para conocer, más a fondo, el universo de este montaje.
- 1. ¿Cómo ha sido el proceso de ensayos de esta obra de teatro del absurdo?
¡Muy largo y muy duro! Porque hemos empezado a trabajar el texto el mayo, aprendiéndolo de memoria exacta, en un principio, para luego poder subirnos al escenario y realizar la puesta en escena. Es un texto muy difícil de aprender, dado que la estructura es la del teatro del absurdo, donde no hay una aparente conexión entre lo que se dice y la acción escénica. Sin la memoria perfecta, era imposible poder montar el espectáculo.
Angelo viajó a Barcelona desde Italia cuando ya teníamos aprendido el texto, para montar todas las acciones, dar un sentido a las palabras y desarrollar ese ambiente onírico que buscábamos. Los personajes son muy claros y definidos, pero nosotras nos íbamos sorprendiendo a cada ensayo, a cada acción montada.
Ha sido muy intenso y divertido porque montábamos cualquier acción escénica y veíamos el sentido de cada cosa que decíamos. Nos reímos mucho, porque es un sinfín de gags, bromas, sketches con un trasfondo poético y profundo que nos emocionaba mucho.
Asimismo, hay que remarcar el esfuerzo que supuso el ensayar casi a diario con un texto que es agotador, por el ritmo, la densidad, la intensidad. A veces hacíamos sesiones de cinco horas. El texto es muy picado y requiere concentración absoluta, emocional y física. Salíamos de los ensayos agotadas. Pero el resultado es absolutamente satisfactorio y sabemos que la obra irá creciendo función tras función!
- 4) ¿Cuál es el mensaje que os gustaría transmitir al público con esta obra?
Lo bueno de esta obra es que no queremos transmitir ningún mensaje. Nosotros estamos explicando o contando una historia que tiene múltiples interpretaciones. ¿Tiene trasfondo? Sí. Pero queremos que cada espectador se quede con lo que más le haya vibrado. Que sienta. Que se emocione. Que viva nuestro bucle de la manera que crea.
El espectador es activo en este sentido. Lo que sí nos gustaría es que se sentara y se dejara llevar por nuestro laberinto absurdo y divertido.
- 5) ¿Ha sido difícil montar un espectáculo de estas características?
Sí, sin Angelo, el director y guionista, hubiera sido imposible. Por la complejidad del texto, por la urgencia de marcar un ritmo que sin un ojo externo sería imposible identificar. Hay muchos matices, muchos trasfondos en cada palabra y sacarlos a la luz ha sido una tarea muy intensa y complicada.
- 7) ¿Por qué habéis apostado por el teatro del absurdo?
Estábamos escribiendo una obra juntas, simple y comercial y, después de lo que hemos vivido en el 2020, que para los artistas ha sido muy complicado y muy duro, decidimos que había que hacer algo más potente. Teníamos ganas de expresar y contar cosas. Este texto, había llegado en manos de Patrizia en 2015, pero en aquella época no era el momento correcto. El momento era ahora.
Así que nos pusimos en contacto con Angelo Orlando que se involucró de manera total, se dieron conjunciones muy acertadas, como por ejemplo la de Saro Cosentino que nos escribió las músicas originales, Icaro Negro que nos sacó la imagen del cartel junto con la fotógrafa Akane Mayo y por supuesto, Sala Ón que nos ofreció todo el espacio y el tiempo que necesitábamos para montar esa maravilla.
